“La candidatura al Mundial de Fútbol de 2030 y el consenso casi unánime que en Zaragoza y en Aragón ha encontrado, no solamente es un reto para la ciudad y la CCAA, sino que ha de contemplarse como el gran elemento transformador de Zaragoza para los siguientes 20 años, tanto en el urbanismo y la movilidad como la gran oportunidad de completar los equipamientos deportivos que la ciudad necesita y hacer que los beneficios directos lleguen a toda la ciudad”. Así ha comenzado el portavoz de Podemos en el Ayuntamiento de Zaragoza, Fernando Rivarés, su comparecencia ante los medios de comunicación.
“Si 2008, con el agua como elemento inspirador, generó nuevos espacios, algunos lamentablemente desaprovechados por no haberlos pensado para el futuro, reformó las riberas o cambió la movilidad de la ciudad con el tranvía, los cinturones de ronda o varios puentes y pasarelas, 2030 debe servir para imaginar la ciudad del futuro y articularla a través del hilo conductor del deporte” ha continuado.
Rivarés ha remarcado que “pocos elementos más integradores que el deporte podemos encontrar que sean capaces de forjar grandes acuerdos y consensos políticos y sociales en la ciudad”. “Todo el deporte: el deporte ocasional, el deporte formativo, el deporte amateur y el deporte profesional. El deporte femenino. El deporte como salud. El deporte de base y el deporte para la tercera edad. Con este pacto queremos que Zaragoza se convierta, con ese horizonte 2030, en toda una ciudad del deporte”.
Para Podemos, la situación en este momento está lejos de ser la óptima pese a las “instalaciones existentes en muchos barrios de la ciudad, pero no todos” debido a que “hay un déficit de infraestructuras deportivas qué, o bien no se han construido nunca, o no cumplen con las dimensiones reglamentarias o se han quedado desfasadas tal y como ha sucedido con el estadio de La Romareda”. Además, esas instalaciones existentes en los barrios “se han quedado pequeñas” ya que esta temporada hasta 34 equipos de distintas disciplinas “no tienen espacio” en los pabellones municipales para competir a la vez que “barrios nuevos o en crecimiento como Barrios del Sur, Barrio Jesús o Miralbueno carecen de equipamientos deportivos básicos existentes para dar servicio a su población. Desde el punto de vista estrictamente deportivo, la situación del deporte zaragozano “no es acorde con el tamaño e importancia de la ciudad”. Esta temporada sólo el baloncesto, el atletismo y el pádel tendrán a clubs disputando la máxima categoría nacional masculina y femenina, “lo que explica por sí sólo la necesidad de apoyos que el mundo del deporte, con unos 240.000 deportistas federados más quiénes lo practican sin ficha».
Rivarés ha detallado también cómo desde 2008 “el gasto por habitante ha descendido progresivamente con todos los gobiernos, pasando de los 65,9 €. por habitante de ese año a los 34,14 € de este 2022, lejos de la media nacional que se sitúa en 46,39 €”. Esto no sólo pasa en Zaragoza, sino que en Aragón, desde hace varias legislaturas “somos la segunda o la tercera comunidad autónoma que menos gasto deportivo realiza”, provocando un agravio comparativo para nuestras federaciones y clubes que han perdido más de la mitad de las ayudas que recibían en el año 2008 frente a otras comunidades con las que terminan compitiendo en desventaja”.
El portavoz ha explicado que “llevamos meses hablando y escuchando a los verdaderos protagonistas del deporte en la ciudad: federaciones, clubs, técnicos y deportistas. Las reivindicaciones son muchas pero la única oportunidad de desarrollarlas es ahora, con la vinculación al nuevo estadio de fútbol y a la candidatura mundialista, en la misma línea que acordó el pleno el pasado mes de julio con la Ciudad del Deporte. De otra manera, podrán pasar otros 20 o 30 años sin que se hagan estas inversiones”.
Para que este Pacto del Deporte se convierta en una realidad, “el consenso entre fuerzas políticas es básico ya que atañe a varias instituciones y trasciende de un mínimo de 3 legislaturas si incluimos ésta” ha reconocido Rivarés, que se ha mostrado totalmente flexible a admitir las aportaciones del resto de grupo: “Los proyectos de ciudad han de ser de todos los partidos. Si esto se queda sólo en una propuesta de Podemos no llegará a ver la luz” ha incidido, pero esperando que una vez se apruebe en el plenos, el Pacto por el Deporte sea refrendado también “por el mundo del deporte, tanto federaciones como clubs como por los principales agentes sociales y vecinales de la ciudad para que vigilen y exijan a quien le toque gobernar en cada momento que se materialice”.
Contenido del Pacto por el Deporte
El texto del pacto supone un compromiso para el “desarrollo y mejora de las infraestructuras deportivas pendientes en la ciudad vinculando las mismas a la financiación y a los beneficios obtenidos por la explotación del nuevo campo de fútbol y a las inversiones necesarias para la candidatura de Zaragoza como sede del Mundial de Fútbol en 2030” e incluye un catálogo de las posibles inversiones que realizar, abierto al acuerdo con el resto de grupos, que se ha elaborado tras el proceso de escucha con distintas federaciones y clubes de la ciudad.
Por un lado se propone la construcción o actualización de infraestructuras especializadas como un estadio de capacidad media, un nuevo velódromo y una pista olímpica de BMX; una pista cubierta de atletismo de 200 m, un circuito de cross y la actualización del estadio Corona de Aragón; un pabellón de gimnasia con altura reglamentaria para la gimnasia rítmica, una piscina olímpica cubierta, un rocódromo homologado para competiciones, la reparación del canal de aguas bravas y la adecuación de un canal de regatas en PLAZA, un pabellón de entrenamiento de Basket Zaragoza, salas para la práctica de diferentes deportes como el ajedrez, el tenis de mesa, la esgrima, halterofilia o bailes deportivos y un frontón de pelota de medidas para competiciones nacionales. Muchos de estos equipamientos podrían ir a la Ciudad del Deporte en Parking Norte.
Por otro lado se propone completar equipamientos de barrios con el CDM Barrios del Sur, pabellones deportivos de Miralbueno y de Barrio Jesús y el cubrimiento de pistas polideportivas exteriores para una práctica más ocasional. Y por último se proponen otras inversiones no estrictamente deportivas pero que complementan todo lo anterior como nuevas instalaciones para la Casa de las Federaciones y el Centro de Medicina del Deporte, una residencia para deportistas y espacios para empresas y I+D+I deportiva en total sinergia con el campus Río Ebro y el Instituto Tecnológico de Aragón.
De la misma manera, el pacto contemplaría el compromiso de “aumentar progresivamente” el gasto en materia deportiva para recuperar en el año 2030, como mínimo, la cantidad que se destinaba en 2008 a esta materia en todas las instituciones.
Podemos quiere que este Pacto por el Deporte sea refrendado por Ayuntamiento de Zaragoza, el Gobierno de Aragón y DPZ y por todos los grupos políticos presentes en cada una de estas instituciones, Federaciones y clubes deportivos de la ciudad así como a los principales agentes sociales y vecinales.