El grupo parlamentario Podemos Aragón propondrá la reversión de los saltos hidroeléctricos que hay en Aragón, aprovechando la finalización de las concesiones vigentes, para lograr su gestión mediante una empresa pública. Esta reversión permitiría unos ingresos extra a la Comunidad aragonesa de, al menos, 80 millones de euros anuales. El diputado Román Sierra así lo defenderá mediante una proposición no de ley en el próximo Pleno de las Cortes de Aragón.
La Confederación Hidrográfica del Ebro asumió recientemente la gestión —y los beneficios— del salto de El Pueyo de Jaca, en el río Caldarés, en la Comarca del Alto Gállego. La central fue construida en 1929 y desde entonces ha generado un gran negocio para las eléctricas que lo han explotado (Endesa ha sido la última). Esta misma situación, la finalización de las concesiones a las empresas hidroeléctricas, se va a producir próximamente con decenas de ellas que van a cumplir los 75 años, y que si no se amplían, van a retornar en cascada al Estado.