El pasado viernes 27 de septiembre fue maravilloso comprobar cómo la gente joven se moviliza para luchar contra la Emergencia Climática. Por ello, aprovechando el paso por Huesca de la XI Caravana Universitaria por el Clima, Marta de Santos, Directora General de Cambio Climático y Educación Ambienta, y Ramón Guirado, Director General de Universidades han querido encontrarse con este grupo de jóvenes voluntarios de la Universidad de Zaragoza que están recorriendo todo el territorio para llevar a cabo este maravilloso proyecto.
Esta caravana se compone de algún miembro de la Oficina Verde de la Universidad de Zaragoza, 6 coordinadores y 65 estudiantes voluntarios que durante una semana recorrerán Aragón para hacer talleres y actividades relacionadas con las buenas prácticas medioambientales. Estos estudiantes hacen una gran labor impartiendo jornadas de formación, charlas y conferencias en materia de sensibilización ambiental en colegios, institutos, asociaciones de vecinos, etc. Además, este año se ha querido hacer hincapié en reivindicar la España Vaciada, así que visitarán también algunas de las localidades más pequeñas de Aragón y harán actividades en colegios con tan solo tres alumnos.
Entre los objetivos básicos que quieren cumplir con la caravana están la sensibilización de la sociedad en materia medioambiental, la implicación de las instituciones públicas locales, formarse ellos mismos como estudiantes universitarios, acercar al ciudadano del territorio la Universidad de Zaragoza y poner en valor los valores medioambientales. Además, otra gran labor que están haciendo es la de difundir la importancia de incorporar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) al día a día de los municipios, incluido de las más pequeños.
En PODEMOS-EQUO nos encantan este tipo de iniciativas, porque percolan en toda la sociedad y además están abanderadas por los más jóvenes. Ellos son conscientes de que sólo tenemos un planeta y debemos aunar esfuerzos para cuidarlo.
No debemos olvidar que “la Tierra no es una herencia de nuestros padres, sino un préstamo de nuestros hijos”.