La reunión que tuvo lugar ayer entre Lambán y Pedro Sánchez en Moncloa se cierra sin nada concreto, sin ningún compromiso en firme y con cero propuestas nuevas. Una vez más, el presidente de Aragón se muestra más preocupado por la situación de Cataluña que por Aragón, la Comunidad que preside. Esto ya sucedió anteriormente el pasado 23 de abril o durante el Debate del Estado de la Comunidad.
Esto nos muestra que, de nuevo, Lambán tenía poco interés en hablar en Madrid de los intereses de los aragoneses y aragonesas o que ha preferido convertir lo que tendría que haber sido una reunión política entre dos presidentes en una reunión de partido, donde hablar de posiciones a defender en los próximos meses. En cualquier caso profundamente decepcionante para Aragón que vuelve a salir perdiendo.
Aragón ha sido la última Autonomía en reunirse con el presidente Sánchez y todavía tenemos sin ejecutar las inversiones programadas en el Presupuesto de 2018. Si a eso le añadimos que a falta de menos de 3 meses para que termine el año todavía no tenemos Presupuestos ni compromisos para inversiones en Aragón, la reunión entre Lambán y Sánchez se ha quedado en una foto.
Desgraciadamente, Aragón lleva demasiados años siendo un territorio de fotografías y de falta de compromisos:
- Seguimos con una de las peores redes de carreteras del Estado que ni garantiza seguridad ni vertebra Aragón como debiera. Aragón es territorio de autovías inacabadas y autopistas amortizadas en las que se sigue pagando peajes. Necesitamos valentía para liberalizar la AP-68 y la AP-2 en vez de apostar por desdoblamientos costosos, y garantizar inversiones y ejecuciones para terminar la A-22 y la A-23.
- Con una red ferroviaria de tiempos pasados y con falta de inversiones y ejecuciones para que la alta velocidad, el Canfranc y el Corredor Cantábrico-Mediterráneo sean una realidad.
- Con un sistema de financiación autonómica que relega a un segundo plano a los territorios despoblados como Aragón. A día de hoy seguimos sin una estrategia transversal para afrontar la problemática de la despoblación.
Sin una apuesta seria y valiente, a pesar de que Podemos lleva mucho tiempo avisando y garantizando partidas presupuestarias desde 2016, para abordar una transición para Andorra y las Comarcas Mineras que contemple un Plan de Desarrollo alternativo ante la amenaza de cierre de la central térmica y poder para avanzar hacia una economía caracterizada por el uso de fuentes de energía renovables, que genere alternativas para el empleo en el territorio.
Aragón necesita voluntad política por parte del Presidente Sánchez para que, recogiendo el mandato de las Cortes de Aragón, solicite la retirada del recurso al TC que interpuso el Gobierno de M.Rajoy a la Ley de Emergencia Social de Aragón que garantiza derechos y oportunidades para combatir las situaciones de emergencia social.