Comunicado 1 de mayo
Este Primero de Mayo en Podemos Aragón volvemos a hacer un llamamiento para salir de nuevo a las calles para que nos escuchen, para gritar que merecemos más, que no nos conformamos con las migajas que nos quieren dejar. Porque nuestros jóvenes quieren poder trabajar de lo que estudian sin unir un contrato en prácticas tras otro y las mujeres estamos hartas de cobrar menos por hacer el mismo trabajo, o de tener que reducir nuestras jornadas laborales para ocuparnos de nuestros hijos o mayores. Este Primero de Mayo salgamos para exigir dignidad y el fin de la precariedad.
Porque creemos firmemente que otro modelo es posible, derogando las reformas laborales del PP y PSOE y apostando por impulsar medidas que aseguren que trabajamos para vivir y no para sobrevivir. Medidas como aumentar el salario mínimo, reducir las jornadas ordinarias para repartir mejor el trabajo y crear así nuevos empleos, reforzar la negociación colectiva, garantizar el “derecho a la desconexión” para que el descanso sea, efectivamente, descanso, o aumentar los permisos de maternidad y paternidad a 16 semanas iguales e intransferibles para ayudar a acabar con la discriminación de género, son sólo una cuestión de voluntad, y los partidos de siempre junto a su nuevo socio, Ciudadanos, han demostrado no tener ninguna.
El Partido Popular y Ciudadanos, apuestan claramente por relaciones laborales donde la persona trabajadora sea la parte débil, en las que no tengamos voz para exigir mejores condiciones porque la precariedad esté generalizada, con salarios bajos y contratos temporales. Lo hacen, además, esgrimiendo el discurso del “emprendimiento”, pero callando que han dejado de lado interesadamente a todas aquellas personas trabajadoras que son los y las autónomas. Y callando también que se sienten muy cómodos con la discriminación laboral sufrida por las mujeres, con la brecha salarial (un 25% en Aragón) y el mayor número de trabajos a tiempo parcial (un 72% del total), porque ello les sirve para mantener el reparto de roles de género y para no financiar políticas sociales públicas que ayuden a acabar con esta discriminación.
Porque lo cierto es que sus recetas han funcionado ya que estaban pensadas, con las reformas laborales del PP y PSOE a la cabeza, no para mejorar las condiciones laborales de la ciudadanía, sino para aumentar los beneficios de las grandes empresas a costa de precarizar nuestro empleo, aumentar la flexibilidad, abaratar el despido o destruir la fuerza de negociación de las organizaciones de trabajadores con las empresas. Prueba de esto es que en los últimos años lo que sí ha aumentado es la cada vez mayor brecha entre ricos y pobres, entre quienes lo tienen todo y las que no tienen nada, que el desempleo haya vuelto a aumentar en Aragón en 1.000 personas en lo que va de año, que haya 20.000 familias aragonesas con todos sus miembros en paro o que la precariedad campa a sus anchas, pues el 30% de los contratos indefinidos duran ya menos de un año.
Porque esa recuperación económica solo llegará si la notamos en unas mejores condiciones de vida, de trabajo, de reparto de tareas y esfuerzos, de redistribución de la riqueza y del fin de las terribles desigualdades sociales y económicas que nos asolan.
Por todo ello, este Primero de Mayo en Podemos Aragón decimos que no podemos callarnos sino que hemos de unirnos, y siguiendo la estela de las grandes manifestaciones feministas del 8-M salir todos y todas a una para reivindicar las condiciones de vida y de trabajo dignas que nos merecemos, porque pelear contra la precariedad a la que quieren acostumbrarnos es pelear por una sociedad más justa y solidaria.