No podemos seguir corriendo y amarrarnos los cordones al mismo tiempo. Necesitamos hacer hincapié en los cuidados de la gente de nuestra organización. Hemos dejado muchas cosas para después por afrontar lo urgente: el asalto a los cielos. Ahora es el momento de retomarlas.
Nuestros representantes públicos han estado metidos en la vorágine de las instituciones y no han encontrado el tiempo para comunicar más y mejor las tareas que hacemos. Para cambiar el país es importante hacer, pero también comunicar cómo se hace. Tenemos canales de participación que sólo están a la espera de ser desarrollados. Queda mucho por innovar, especialmente para que venga más gente nueva y que quienes ya están se encuentren bien.
Queremos ser el “partido de la gente” y para eso es importante cuidar a la gente. Los círculos son la herramienta fundamental de Podemos, lo que nos distingue orgánicamente con respecto al resto de partidos, y hay en ellos muchas personas que lo están pasando mal.
No entramos en política hace dos años para elegir entre ‘Guatemala y Guatepeor’. Vivimos momentos excepcionales en nuestro país, si nos rendimos nuestra gente no nos lo perdonaría nunca. Es importante que la decisión del tipo de gobierno que se vislumbra lo decida la gente. Nosotrxs mandamos obedeciendo.